La investigadora del Centro de Estudios Públicos (CEP), Sylvia Eyzaguirre, desmenuza los desempeños y recalca que aún no se puede evaluar las reformas de Bachelet.
Pese a que la educación ha sido el alma del debate durante este Gobierno, los resultados de la Prueba de Selección Universitaria (PSU) no mostraron ningún avance ni diferencia significativa de las brechas entre colegios particulares, subvencionados y municipales.
¿En general los resultados de esta PSU estuvieron mejores o peores que el año pasado?
-La PSU es una prueba estandarizada, y eso significa que la distribución de los puntajes es siempre la misma todos los años. La mediana está en 500 puntos, es decir, la mitad de las personas que rinde la prueba obtiene un puntaje inferior a 500 puntos y la otra mitad por sobre los 500 puntos. El 32% de quienes rinden la prueba obtienen menos de 450 puntos y el 17% logra más de 600 puntos. Eso es así por construcción de la prueba. Lo único que puede variar es el número de puntajes nacionales.
¿Hubo cambios significativos?
-Este año hubo considerablemente más puntajes nacionales que el año pasado (163 versus 65), pero significativamente menos que el año antepasado (253). Dadas las características de la prueba no podemos decir que los resultados estuvieron mejores o peores, pero sí se puede analizar cómo se distribuyen en función del tipo de establecimiento escolar o nivel socioeconómico de los alumnos.
¿Y cómo están esos resultados?
-En términos de puntajes nacionales, observamos que el porcentaje de alumnos de liceos municipales bajó de 15% a 11%, al igual que los colegios particulares pagados de 74% a 69%, mientras que los particulares subvencionados aumentaron de 11% a 20%. Si miramos los promedios PSU por tipo de colegio, no notamos ningún cambio. Este año los municipales promediaron 469 puntos, igual que el año pasado, los particulares subvencionados 502 y los particulares pagados 600, prácticamente igual que en los años anteriores.
¿Y respecto de la posibilidad de postular a la universidad?
-Si miramos el porcentaje de alumnos que obtuvo 700 puntos o más en la PSU, que permite optar por una universidad de prestigio, notamos que el 56% de estos alumnos estudió en un colegio particular pagado, el 30% en un colegio particular subvencionado y un 13% en un liceo municipal. Es decir, el 14% de los alumnos de colegios particulares obtuvo 700 puntos o más en la PSU, mientras que sólo el 1% de los alumnos de colegios particulares subvencionados y municipales obtuvo 700 puntos o más.
De los municipales, 45 mil alumnos no lograron los 500 puntos, ¿qué correlación hay respecto del total?
-La mayor parte de los estudiantes con puntajes bajo 500 puntos estudió en un colegio municipal o particular subvencionado. Mientras un 45% de los alumnos de liceos municipales obtuvo menos de 450 puntos; 30% en el sector particular subvencionado obtuvo menos de 450 puntos; y sólo el 8% en el particular pagado.
¿Estos resultados dicen algo de la calidad de educación?
-Es difícil hablar a partir de estos números de la calidad de la educación, porque claramente en estos resultados también influye el nivel socioeconómico. Los liceos municipales concentran a los niños más vulnerables mientras que los colegios particulares pagados a los más privilegiados. Sin embargo, un análisis más fino nos muestra que hay un número importante de liceos municipales y subvencionados que tienen muy buenos resultados, mejores incluso que los de algunos colegios particulares pagados.
¿Cómo cuáles, en qué se diferencian?
-Están los liceos bicentenario de Puente Alto,Temuco, Los Angeles, Coronel, que obtuvieron excelentes resultados, no seleccionan y tienen alumnos vulnerables. Habría que investigar qué los diferencia de otros, sí sé que tienen planes de nivelación en verano.
En los últimos años se ha invertido bastante en educación, sin embargo los colegios particulares siguen liderando con creces, ¿cómo se explica?
-Efectivamente, en los últimos 20 años Chile ha aumentado significativamente el gasto fiscal en educación y ello se ha traducido en una mejora significativa en los resultados de aprendizaje de nuestros niños y jóvenes. Tanto las pruebas nacionales como internacionales muestran que Chile ha progresado enormemente en la calidad de su educación, aun cuando todavía el camino que nos queda por recorrer es largo. Dicho esto, es difícil que en promedio los liceos municipales y particulares subvencionados igualen en rendimiento a los colegios particulares pagados, cuando los últimos cobran cerca de $300.000 mensuales por alumno, mientras que la subvención es aproximadamente de $70.000 y si consideramos la Subvención Escolar Preferencial estaría llegando a los $100.000.
¿Eso se nota después en las postulaciones?
-Si consideramos los resultados de la PSU del año pasado, la diferencia entre los alumnos de liceos municipales que rinde la PSU y luego postula a una universidad del SUA (sistema único de admisión) es enorme, mientras que en el sector particular pagado la brecha es mínima (ver gráfico).
La brecha de género se mantiene, incluso hubo una carta de varias mujeres destacadas en el ámbito público que sugería revisar los sesgos de género de la PSU, ¿lo estima conveniente?
-El informe de Pearson que auditó la PSU encontró varios problemas a la prueba, entre ellos el sesgo de género. Una prueba como ésta, con las altas consecuencias que conlleva para los jóvenes, debe cumplir con los estándares internacionales. Es lamentable que aún no se hayan corregido las graves falencias. Esto es claramente responsabilidad de la Universidad de Chile, quien ha sido indolente a este respecto. Es evidente que la actual institucionalidad no está a la altura del desafío encomendado y urge subsanar esta situación, entregándole la responsabilidad del diseño e implementación de la PSU a una institución independiente y profesional.
¿Hay aspectos de la reforma educacional que ya se puedan evaluar en este certamen?
-No, es demasiado temprano para evaluar la reforma educacional de Bachelet. El copago aún no se ha eliminado, el nuevo sistema de selección sólo se ha aplicado en Magallanes y para alumnos de pre-kínder, kínder y 7° básico. Todavía no vence el plazo para que los colegios dejen de lucrar, de manera que es imposible evaluar la reforma a partir de estos resultados. Pero hay algo interesante de observar. Los Liceos Bicentenarios creados en el Gobierno de Piñera han mostrado un desempeño destacado tanto en el Simce como ahora en la PSU, promediaron cerca de 70 puntos más que los liceos municipales y casi 40 puntos más que los subvencionados. Esta política muestra que sí se puede mejorar la calidad de la educación municipal.
