Los expertos John Griffith, Paz Zárate y Fernando Wilson abordaron la perspectiva estratégica, geopolítica e histórica de la guerra en Ucrania y las consecuencias del conflicto para el mundo.
“La historia está llena de casos en que se ha obtenido la victoria militar pero no se ha ganado la guerra”, recordó Jorge Griffith, experto en defensa y jefe de estudios de Athena Lab, al iniciar su exposición en el seminario “¿Está Putin perdiendo la guerra? que se desarrolló el 29 de marzo pasado en el auditorio del Centro de Estudios Públicos. Y esto pareciera ser lo que le está pasando a Rusia, dijo, al analizar desde una perspectiva estratégica los objetivos que tenía ese país al atacar a Ucrania. “Se planificó una guerra de destrucción un solo gran golpe y la realidad dijo otra cosa”, afirmó agregando que hubo una mala preparación económica y logística y un deficiente accionar de los medios de inteligencia”, sentenció.
Este encuentro que fue moderado por la investigadora, Sylvia Eyzaguirre, contó con la participación del profesor de la Universidad Adolfo Ibánez, Fernando Wilson y la experta en derecho internacional y solución pacífica de controversias, Paz Zárate. Griffith, sostuvo que efectivamente, Putin está perdiendo la guerra porque no ha logrado ningún objetivo político y el factor tiempo está en su contra. “Adicionalmente esto podría acarrear la pérdida de poder interno, pero el problema es que quien lo reemplaza porque hoy sigue siendo la persona que maneja el gran arsenal nuclear ruso”.
Por su parte, Fernando Wilson se refirió a la historia de Rusia, desde sus orígenes hasta la formación y el posterior desmembramiento de la Unión Soviética y la necesidad de establecer límites que lo protejan debido a la falta de rasgos geográficos que lo separen del mundo occidental. En este sentido, añadió, para Putin esta aventura tiene como objetivo de fondo la retención del poder de esa gran Rusia. En ese marco se entienden sus avances en Chechenia, Georgia y Crimea porque quiere recuperar sus fronteras defendibles. “Ahora bien, afirmó, su incursión en Ucrania puede convertir a Rusia en un paria internacional, al estilo del líder coreano Kim Jong-un”.
Desde esta misma perspectiva, Paz Zárate, explicó que este no es un conflicto entre Ucrania y Rusia ni tampoco regional, sino que entre Rusia y Occidente y eso lo distingue de otros enfrentamientos que se han desarrollado desde 1945 en adelante: «Putin lleva bastantes años en una campaña que involucra una narrativa contra la democracia liberal y eso significa contra la Unión Europea”. De ahí que, según la experta, después de este conflicto no vamos volver a la normalidad internacional multilateral. “Rusia va a ser por largo tiempo un paria y va a sufrir por largo tiempo ese estigma. Tenemos métodos legales que ya están funcionando para hacer efectiva por un lado, la responsabilidad de Rusia y por otro lado, la de los jerarcas rusos”. Además, destacó que es la primera guerra con redes sociales que permite ver cómo se están cometiendo los crímenes de guerra, así como también el que actores no estatales, como las empresas, sancionan a Rusia por estos crímenes. Así, concluye, «la Unión Europea y la OTAN se van a ver fortalecidos, que era exactamente lo contrario de lo que la Rusia perseguía».