Nº 89, octubre 1991.
Puntos de Referencia
Economía

Ahorro, tipo de cambio real y política monetaria

Francisco Rosende.

  • La mantención de elevadas tasas de ahorro es una condición necesaria para el logro de un crecimiento sostenido en los niveles de consumo de la población. Un importante esfuerzo de ahorro —especialmente cuando, como consecuencia de un cambio favorable en las condiciones externas, se incrementa la capacidad de gasto de la economía- promoverá un comportamiento estable del tipo de cambio real. En este sentido, la trayectoria que observe esta variable depende críticamente de las condiciones de ahorro que prevalezcan en la economía.
  • Las dificultades que han encontrado las autoridades económicas para evitar una caída del tipo de cambio real refleja la inconsistencia existente entre las tasas de ahorro que registra la economía y el nivel del tipo de cambio real. Otra de las manifestaciones de esta incompatibilidad es la dificultad que tiene el Banco Central para administrar la política monetaria en el contexto mencionado.
  • Un elemento que ha acentuado el «desequilibrio cambiario» es la propia caída que ha observado el tipo de cambio real desde comienzos de 1990. Dado el esquema de determinación del tipo de cambio actualmente prevaleciente, esta caída ha estimulado una mayor afluencia de capitales, la que ha reforzado la tendencia declinante del tipo de cambio real.
  • La mantención de estímulos al ahorro que permitan sostener una trayectoria estable del tipo de cambio real es una contribución importante que pueden realizar las autoridades para el logro de un progreso sostenido. El logro de dicha trayectoria, sin embargo, se verá facilitada si el Banco Central no preanuncia sus rangos de intervención en el mercado cambiario. En este caso se promoverá un desincentivo de mercado para los movimientos de capitales de corto plazo, lo que facilitará tanto la mantención misma de un tipo de cambio real estable como la administración de la política monetaria.