El estudio “Logros de aprendizaje y exclusión escolar en la región de Atacama” establece que…
- Los establecimientos escolares del Servicio Local de Educación Pública (SLEP) de Atacama llevan
más de 55 días paralizados por mejoras en la gestión y en la infraestructura de las escuelas de la región.
Este prolongado paro pone en serio riesgo la recuperación educativa. - Para dimensionar la magnitud del desafío que enfrenta el sistema escolar de Atacama, en este Punto
de Referencia se analizan los indicadores de logros de aprendizaje y exclusión escolar en la región,
con un énfasis en los establecimientos SLEP. - Los resultados muestran que los establecimientos de Atacama arrastran bajos indicadores de logros
de aprendizaje. Estos han alcanzado el promedio regional más bajo de las mediciones SIMCE de
matemáticas y lectura, tanto en el 2018 (antes de la pandemia) como en el 2022 (después de la pandemia). - En cuarto básico, los establecimientos dependientes del SLEP de Atacama muestran una pronunciada
caída en sus puntajes SIMCE entre las dos últimas mediciones que duplica en magnitud a la
registrada a nivel nacional por los establecimientos SLEP en matemáticas y la triplica en lectura. En
segundo medio, estos establecimientos registran caídas similares a las registradas por las escuelas
SLEP del país, las que además tienden a mostrar bajos resultados SIMCE. - En cuanto a los indicadores de exclusión, la región de Atacama tuvo una tasa de desvinculación de
1,5% el año 2022, superior a la tasa nacional de 1,47%. Esto quiere decir que unos 1.000 escolares
salieron del sistema en la región. Además, la zona registra altos niveles de ausentismo grave: el año
pasado unos 40 mil escolares atacameños pudieron repetir por esta razón. La situación no parece
mejorar del todo en lo que va del 2023. Además, estos altos niveles de ausentismo grave son anteriores
a la pandemia. - La situación escolar en Atacama es crítica y el prolongado paro de profesores la empeorará. Resulta
dramático que estas escuelas arrastren bajos indicadores de logro académico y altos indicadores de
exclusión escolares por varios años (al menos desde el 2018) sin que se hayan tomado medidas efectivas
para remediar esta situación.
