Rüdiger Wolfrum, una de las autoridades mundiales en esta materia, participó en un seminario organizado con el Instituto Desafíos de la Democracia (IDD).
¿Cuál es la función de un Comité de Armonización? Esa fue la pregunta que buscó responder Rüdiger Wolfrum, profesor de la Universidad de Heidelberg y director honorario de la Fundación Max Planck para la Paz Internacional y el Estado de Derecho, en el seminario “¿Qué podemos aprender de las experiencias comparadas de armonización constitucional”, que realizaron en conjunto el Centro de Estudios Públicos (CEP) y el Instituto Desafíos de la Democracia (IDD) el 7 de abril pasado.
Considerado una de las máximas autoridades mundiales en la materia, el profesor se refirió a los problemas de fondo y prácticos que impone la redacción de una constitución y la importancia de la función de armonización para el éxito de los procesos constituyentes. A este respecto señaló que » lo primero es asegurarse que el idioma se utilice en forma correcta y que no es el mandato del comité de redacción cambiar algo en términos de fondo”. Por otra parte, manifestó que leer una constitución no es fácil, “no es una historieta de Mickey Mouse pero en ella está el alma de un país y como tal, debiera ser entendible incluso por personas que no sean abogados». Concluyó su exposición diciendo que «una Constitución siempre es un compromiso. No podemos asumir que vamos a tener una Constitución perfecta que viene de la nada, las personas tienen desacuerdos y hay que ceder”, afirmó.
La subdirectora del Instituto de Ciencias Políticas de la Pontificia Universidad Católica, Valeria Palanza y Samuel Tschorne, profesor de la Facultad de Derecho de la Universidad Adolfo Ibáñez comentaron la presentación de Wolfum en este encuentro que fue moderada por el investigador del CEP, Eugenio García-Huidobro.