La Tercera, 24 de octubre de 2014
Opinión

«Se trata de un mito» II

Sylvia Eyzaguirre T..

Gregory Elacqua afirma que los colegios con lucro tienen peor ambiente escolar; sin embargo, nuevamente olvida mencionar la evidencia que muestra que el número de alumnos por sala y el número de horas de clases inciden en la calidad del ambiente escolar. Dicha evidencia sería de mucha utilidad, pues a nivel internacional no hay certeza concluyente que permita sostener tal afirmación. Tampoco se refiere a la evidencia que muestra que los colegios con lucro tienen profesores menos destacados. Al menos, yo no conozco ningún estudio que haya medido el desempeño de los docentes en los diferentes sectores.

Por último, Elacqua afirma que la expansión de las escuelas con lucro debilitó la educación pública. Claramente, se refiere a la merma en la matrícula y no a la calidad, pues tampoco la evidencia permite asegurar que el culpable de la calidad de la educación municipal sea la existencia de colegios con lucro. Dado que poner término al lucro no responde a una preocupación por la calidad, ¿cuál es el fin que se persigue? Hasta ahora, pensaba que su fin respondía a una determinada concepción de “bien público”, por cierto legítima; sin embargo, me surge la duda de si no se trata de una estrategia para aumentar la matrícula municipal, restringiendo la oferta privada.