Investigador y Coordinador Académico del CEP, Sebastián Izquierdo comenta los resultados de la encuesta difundida este miércoles por el centro de estudios, que marcó una caída de Boric y la consolidación de Matthei y Kast. “Uno observa una evaluación mayor por personajes más bien de la derecha y eso tiene correlato cuando uno pregunta cuáles son las principales preocupaciones de la ciudadanía”, afirma.
– Llama la atención la baja de Boric, que aparece con el 22% de apoyo, rompiendo la idea del 30% de respaldo como una base sólida y sostenible mirando a las próximas elecciones. ¿Cuál es tu visión al respecto?
Bueno, efectivamente, en las mediciones anteriores lo que uno observaba era una fluctuación entre un 32% a un 24% de aprobación. Y ahí es donde uno habla del famoso tercio. Lo que hoy día estamos observando justamente es que en realidad estamos en un 22%, es decir, en un quinto. Es una mala noticia precisamente para el gobierno en un año electoral.
– ¿Hay una especie de momento oportuno para la derecha porque sus candidatos están mejor evaluados y los temas que se suelen relacionar con este sector son los que más le importan a la opinión pública, como la seguridad, el orden?
Uno observa una evaluación mayor por personajes más bien de la derecha y eso tiene correlato cuando uno pregunta cuáles son las principales preocupaciones de la ciudadanía. Es bien afirmativo con varias mediciones de la CEP, donde lejos la preocupación más relevante es la delincuencia, los asaltos, los robos, en torno al 60%.
Uno tendería a pensar que justamente los candidatos de derecha tienen esa capacidad para poder ser más creíbles frente a la resolución de ese problema. Y cuando se le pregunta sobre las prioridades de la ciudadanía, ya no solamente hoy sino que mirando el futuro, en los próximos 10 años nuevamente está el orden, pero esto viene acompañado también con el crecimiento, ambos aumentando, con respecto a la última medición. En cambio los anhelos de mayor igualdad están en tercera prioridad y por eso uno podría afirmar que con esta medición hay más elementos de la derecha.
– ¿La encuesta consolida el aumento de Kast en desmedro de Kaiser?
Yo creo que la primera conclusión que uno puede extraer es que hay baja adhesión a los partidos políticos, baja confianza en los políticos en general. Y también que esta elección está abierta, porque ante la pregunta sobre quién le gustaría que fuera el próximo Presidente, más de la mitad de las personas no sabe, no contesta, por lo tanto aún está muy abierta.
En la respuesta espontánea, los tres primeros candidatos son de un sector político de la derecha: Matthei, Kast y Kaiser. Destaca justamente Evelyn Matthei con un alto grado de valoración y también de conocimiento.
– ¿La encuesta no alcanza a medir sus polémicas declaraciones sobre el golpe?
No, el trabajo de campo de esta encuesta fue entre el 6 de mayo y el 14 de abril. José Antonio Kast aumentó su valoración positiva y también disminuyó la negativa. Además tiene un alto porcentaje de conocimiento y en las preguntas espontáneas también salió con una posición mejor a la de Kaiser.
– A la vez el Partido Republicano es más valorado.
Hay tener cuidado con las cifras porque lo que muestran de manera muy significativa es la poca identificación con los partidos políticos.
– ¿Carolina Tohá presenta un cierto estancamiento?
Hay aumento de la valoración negativa y disminución de la positiva con un nivel de conocimiento cercano al 80%. Cuando se lo compara con otros candidatos del oficialismo como la ex ministra Jara, lo que uno ve es que el conocimiento de ella es bastante más bajo, de un 34%. Ahí la ex ministra Tohá tiene cierta ventaja en conocimiento.
– La gente está dispuesta a menor libertad para tener más orden. ¿Qué representa?
Hay una valoración muy alta en torno al trabajo duro, al valor del mérito. Hay una mirada relevante de que más de la mitad de la población siente que estamos estancados, incluso un tercio de ellas en decadencia. Más que conservadora, yo diría que hay un anhelo al orden. Quizás muy influenciado por el estallido o el desorden que nos dejó la pandemia.
– Por ejemplo, el tema de la conflictividad entre chilenos e inmigrantes también marca récords, crece nueve puntos.
Total, porque aumenta desde un 44% a un 55% la percepción del conflicto que es muy fuerte entre los inmigrantes y los chilenos, y justamente ahí también hay un elemento relevante. Esta encuesta tiene un ímpetu en esta creencia, a mi juicio, de que estamos peor, que las próximas generaciones van a estar peor, de que no importa si yo trabajo duro. Hay una valoración relevante por parte de la ciudadanía de salir adelante por su propio medio. No quiero decir que el Estado no tenga ningún rol, pero sí hay mayor individualismo.
– ¿Qué conclusión es la más importante según tu punto de vista?
Hay dos caras. Por un lado, tenemos conflictos, ciertas tensiones. Hablamos de los migrantes, pero también entre los jóvenes, los adultos mayores, los hombres, las mujeres. Por otro lado, entrega ciertas claves justamente de mayor empatía como para poder resolver nuestros problemas. Creo que esos elementos son bastante valiosos justamente para poder comprender las complejidades que tiene nuestra sociedad.
Por: Marcelo Soto | Ex-Ante.