La Segunda
Opinión
Educación

Compromiso por la reactivación educativa

Mauricio Salgado O., Sebastián Izquierdo R..

Compromiso por la reactivación educativa

La reactivación educativa requiere esfuerzos continuos, recursos económicos adicionales y una atención equilibrada en todas las áreas de aprendizaje, sin dejar a nadie rezagado.

Los resultados del último SIMCE han develado la profunda crisis educativa que dejó la pandemia, así como también han vuelto a evidenciar la realidad de un sistema educativo que no ha logrado mejoras significativas en resultados de aprendizaje en más de una década. Por lo mismo, resulta alentador observar las señales de progreso reportadas en el balance del trimestre escolar marzo-mayo entregado por el MINEDUC este 5 de julio, aunque se trata aún de un reporte general que impide una evaluación más acuciosa.

Para revertir las caídas en los aprendizajes, es fundamental que niños, niñas y jóvenes regresen a las escuelas. En este sentido, es muy positivo constatar que entre marzo y mayo de este año, en comparación con el mismo período del año anterior, se ha logrado un incremento de 3 puntos porcentuales en la asistencia a clases. De mantenerse esta tendencia por lo que resta del año, nos acercaríamos a los niveles de asistencia pre-pandemia. Este importante logro no es una victoria definitiva. La inasistencia de los escolares tiende a aumentar a medida que avanza el año escolar, por lo que los esfuerzos deben ser aún mayores para mantener este buen indicador.

Para tener éxito en la reincorporación de los estudiantes a sus escuelas, debemos enfocar nuestros esfuerzos especialmente en aquellos con ausentismo escolar grave. Este se refiere a estudiantes que faltan a clases más del 15% del tiempo (casi seis semanas de clases), lo que, según la normativa vigente, puede ser causal de repitencia. Según el balance del MINEDUC, la inasistencia grave disminuyó en 10 puntos porcentuales, lo que equivale a 330.000 estudiantes menos en esta condición. El ausentismo grave es un fuerte predictor de la exclusión escolar. Lamentablemente el balance del MINEDUC no entrega información sobre la revinculación de los más de 50.000 escolares que sólo el año pasado salieron del sistema.

Los promedios suelen ocultar realidades. A pesar de las mejoras, la situación en la región de Atacama es muy preocupante. En el balance entregado por el MINEDUC, fue la única región en que la asistencia promedio cayó. El año 2022 las escuelas de esta región no lograron que unos 40.000 escolares asistieran regularmente a clases, quienes perdieron oportunidades educativas vitales. Las autoridades de educación al nivel regional y central deben abordar seriamente esta grave situación que en Atacama se arrastra incluso desde antes de la pandemia.

La reactivación educativa requiere esfuerzos continuos, recursos económicos adicionales y una atención equilibrada en todas las áreas de aprendizaje, sin dejar a nadie rezagado. Si bien se observan avances importantes, los desafíos que enfrentamos son significativos y requieren una rendición de cuentas más detallada por parte del MINEDUC. La fuerte caída en los aprendizajes y la menor vinculación de los niños, niñas y jóvenes con sus escuelas nos han mostrado que el camino por delante será empinado.