- Las propuestas de reforma al sistema previsional apuntarían a reducir el alto número de vendedores y el costo excesivo que éstos significarían para el sistema. El costo previsional para los afiliados y el costo global de administración de los fondos es, sin embargo, comparativamente baja.
- La denominada «crisis de los vendedores» tiene su origen, más bien, en el ajuste de la industria a un menor número de participantes. Este número se reduciría aún más de prosperar las propuestas gubernamentales. Dejar el manejo de los recursos previsionales, equivalentes a la mitad del stock de capital, en unas pocas manos sin medir el impacto que una mala asignación de éstos puede causar sobre la economía nacional parece un error. 1
- El problema de los vendedores surge de la baja sensibilidad al precio de la demanda que enfrentan las AFP. S i ésta fuese alta las AFP competirían más por precios lo que, al reducir los márgenes, disminuiría el número de vendedores. Para aumentar la sensibilidad al precio de la demanda en este mercado el gobierno ha propuesto tres medidas principales: i) negociación en grupos de afiliados, ¡i) descuento por permanencia, y iii) diferenciación de comisiones.
- La diferenciación de comisiones, en la presencia de economías de escala, puede llevar a una fuerte concentración de la industria de AFP. La evidencia que se presenta aquí sugiere que en esta industria hay importantes economías de escala.
- ¿Qué se puede hacer para aumentar la sensibilidad al precio de la demanda que enfrentan las AFP sin incurrir en el riesgo de concentración? Una reforma posible y simple es la de eliminar las estadísticas oficiales de rentabilidad. Estas, por una parte, no son un adecuado predictor de rentabilidades futuras. Por otra, guían excesivamente las decisiones de los consumidores quienes no ponen atención a la estructura de comisiones. Esto genera un escenario en el que las AFP deben mantener una poderosa fuerza de ventas para reducir los riesgos de pérdida de clientes que dichos rankings pueden acarrear.