El presente documento evalúa el potencial efecto en desigualdad si se transfiere presupuesto desde programas sociales considerados menos eficientes hacia una transferencia monetaria en la forma de un impuesto negativo al ingreso del trabajo (INIT).
La evidencia internacional es que estos programas de transferencias, si son correctamente diseñados e implementados, resultan en una disminución importante de los niveles de desigualdad y pobreza . Por otra parte, el Estado chileno redistribuye relativamente pocos ingresos entre distintos segmentos de la población, lo que explica por qué nuestros índices de desigualdad presentan cambios menores al comparar la distribución de los ingresos autónomos (generados por las familias) con los ingresos monetarios (después de impuestos y transferencias recibidas desde el Estado), a diferencia de lo que ocurre, por ejemplo, en otros países de la OCDE .
En esta propuesta, nos concentramos en el caso del INIT debido a que en Chile existen escasos modelos de transferencias monetarias directas. Este programa es relativamente sencillo de comunicar, transparente en su diseño y contamos con una estimación de sus efectos potenciales máximos. Obviamente, un programa integral de transferencias monetarias debería combinar y compatibilizar subsidios a los ingresos laborales con programas de pensiones solidarias, transferencias no condicionadas, seguro de cesantía solidario y otros programas similares.
El primer paso en este análisis consiste en estimar, al menos en términos relativos, la eficiencia de los programas sociales en aplicación en Chile para poder determinar cuáles tienen peor desempeño, siendo, por lo tanto, candidatos a ser eliminados, despejando un presupuesto que se podría destinar a otros fines. Para realizar esta categorización, recurrimos al Banco Integrado de Programas Sociales (BIPS), plataforma en la cual el Ministerio de Desarrollo Social compila y presenta alguna información para cada programa social en ejecución.
Previo a la categorización, se realiza un análisis sobre la información presente en la plataforma BIPS y cuáles son los potenciales usos de ésta para, posteriormente, definir criterios de eficiencia y poder realizar la evaluación de los programas de acuerdo a ellos.
Encontramos que, dependiendo de los criterios aplicados, entre 197 y 3.000 millones de dólares asignados a programas que presentan peores resultados podrían reasignarse a una transferencia directa como la propuesta lo que tendría el efecto de disminuir el índice de GINI entre un 1,0 y un 8,0 por ciento lo que más que duplicaría el impacto que actualmente tiene nuestro sistema de impuestos y transferencias en la reducción de la desigualdad.
La estructura de este documento es la siguiente: el primer apartado consiste en un análisis comparativo de los informes contenidos en el BIPS, que presenta una descripción de las funciones y atribuciones del BIPS y del Ministerio de Desarrollo Social (MDS); se describe cómo el contenido de información se ha modificado en el tiempo comparando, ítem a ítem, el contenido de los reportes publicados en 2013 y 2016. Luego, en la segunda parte de este artículo, se introduce una evaluación parcial de programas en que se describen los criterios de evaluación de eficiencia (en función de la información disponible presentada anteriormente) para los programas que serán finalmente seleccionados y señalados como candidatos a eliminación. A continuación, se presenta una descripción y evaluación de la propuesta INIT, explicando de manera breve la política y evaluando, según los presupuestos potencialmente liberados, el efecto máximo que ésta tendría sobre los niveles de desigualdad de ingresos. El último apartado presenta algunas conclusiones.