El Mercurio, 18 de julio de 2016
Opinión

Primarias municipales: Alarma injustificada

Lucas Sierra I., Ricardo González T., Francisco Szederkenyi V..

Tras las primarias municipales celebradas el mes pasado se levantaron voces alarmistas sobre la participación electoral

Tras las primarias municipales celebradas el mes pasado se levantaron voces alarmistas sobre la participación electoral. El 5,5% del padrón que votó fue considerado bajo por algunos, quienes recordaron el 42% que votó en las elecciones municipales de 2012. Algunos hasta propusieron resucitar el voto obligatorio.

¿Votó poca gente en las primarias municipales? El punto es en relación con qué.

Compararlas con las municipales de 2012 no es justo. Las primarias no se pueden comparar con una elección propiamente tal porque son distintas. Debe hacerse con otras primarias.

El problema es que no tenemos otras primarias legales municipales con qué hacerlo, pues estas son las primeras. No queda más que compararlas con la única otra primaria que tenemos bajo la ley actual: la presidencial de 2013.

Esta comparación tampoco es perfecta, pues las primarias presidenciales y las municipales también tienen diferencias. Por lo pronto, en las municipales no hay franja de televisión. Hubo, eso sí, unos mensajes informativos del Servel, pero, a diferencia de la franja televisiva, ellos no son propaganda electoral. Comparada con la presidencial de 2013, la propaganda en las recientes municipales fue escasa.

Además, las recientes primarias municipales tuvieron una particularidad que las vuelve a hacer imperfectamente comparables con las presidenciales 2013: se celebraron en 93 comunas y solo en tres compitieron las dos mayores coaliciones políticas simultáneamente. En 2013, las presidenciales se celebraron en todo Chile, con las dos coaliciones corriendo en paralelo.

Dicho todo esto, ¿votó poca gente en junio pasado? Votaron menos que en las primarias presidenciales, pero no tanto menos. Por ejemplo, en las tres comunas en que compitieron las dos coaliciones más grandes (Arica, Concón y San Fernando), la participación en las primarias municipales fue entre 3 y 5 puntos porcentuales menor que en las primarias presidenciales.

¿Y qué pasó en las otras 90 comunas donde hubo primarias de solo una coalición? La participación en las primarias presidenciales fue 16% mayor que en las municipales. Pero esto se podría explicar considerando que los adherentes de otras coaliciones o partidos no fueron a votar en las primarias municipales, simplemente, porque no podían escoger candidatos de su tendencia política. Por lo mismo, para comparar con las de 2013 hay que hacer algunos ajustes.

Se podría pensar que en esas 90 comunas con una sola coalición corriendo, las personas que votaron tenían una cierta identidad política con esa coalición. Es posible que también consideraciones personales jugaran un papel -ellas suelen ser relevantes a nivel local-, pero parece razonable pensar que, en general, las personas que votaron en las comunas en que la Nueva Mayoría celebró primarias votan Nueva Mayoría. Y lo mismo, por supuesto, respecto de Chile Vamos.

Si esta premisa es correcta, entonces resulta adecuada la comparación entre el número de personas que participaron en las primarias municipales de cada coalición este año y los votantes de cada coalición en las presidenciales de 2013. En ese caso, la diferencia en la participación entre ambas primarias vuelve a reducirse: en las primarias presidenciales de 2013, los candidatos de la Nueva Mayoría obtuvieron 9,8% más de votos que sus candidatos en las primarias municipales de 2016. En la Alianza esta diferencia es todavía menor: solo un 0,4% más en 2013 que en junio pasado.

¿Votó, entonces, poca gente en las primarias municipales? Votó menos que en las primarias presidenciales, de esto no hay duda.

Pero no mucho menos: la diferencia no es mayor a 10%, número bajo si se considera que en las presidenciales compitieron ambas coaliciones en todo el país, con franja de TV y más propaganda; y que en las municipales, en cambio, ambas coaliciones compitieron en solo tres de las 93 comunas involucradas, sin franja de TV y con poca propaganda.

No hay que sacar, por tanto, conclusiones apresuradas sobre participación electoral de las primarias municipales. Y menos alarmistas.