El Mercurio
Opinión

Un cuerpo saludable

Leonidas Montes L..

Un cuerpo saludable

Considerando la severidad de esta crisis, no hemos perdido tanto. La salud y recuperación de nuestra economía son sorprendentes.

En la historia del pensamiento político, la idea de la “Política” como un cuerpo nos ha acompañado desde los clásicos. Basta pensar en la emblemática figura del Leviatán (1651) de Thomas Hobbes. En economía pasa algo similar. Pero fue un famoso médico francés el que inició y popularizó la idea de la economía como un cuerpo vivo.

El padre de los fisiócratas, Francois Quesnay (1694-1774), fue el médico de cabecera de Luis XV y Madame Pompadour. En 1758 publicó su “Tableau economique”. Aquí analiza el funcionamiento de la economía como si fuera un cuerpo por el que fluye y circula sangre, donde la tierra sería el corazón que alimenta a la economía. Por eso mismo se llaman fisiócratas (physis y krátos, esto es, gobierno de la naturaleza).

Desde ese entonces, asociar la economía a una ciencia médica ha sido una inagotable fuente de metáforas en la historia del pensamiento económico. Si hasta Milton Friedman —un promotor de la economía como ciencia— se sentía como un médico que diagnosticaba los problemas de la economía.

Después de un año en pandemia, es alentador evaluar la salud de nuestra economía. Chile tiene un cuerpo fuerte y resiliente. Rodrigo Vergara, en una entrevista reciente, destacó que el último Imacec estuvo solo un 1,5% por debajo de lo que estaba antes de la crisis del covid. Considerando la severidad de esta crisis, no hemos perdido tanto. Lo cierto es que la salud y recuperación de nuestra economía son sorprendentes. Nuestro cuerpo estaba —y sigue estando— bien parado en su lucha contra el virus.

Las predicciones del Banco Central para el crecimiento del PIB son entre 5,5% y 6,5% para este año. El FMI las subió del 4,5% al 5,8%. Y algunos economistas no descartan que alcancemos ese 7% que hace ya tiempo no vemos en Chile. Claro que también hay factores exógenos que explican estas favorables expectativas. Por supuesto, el precio del cobre y la reactivación mundial ayudan. Pero existen otros factores endógenos, aquellos que pertenecen al cuerpo de nuestra economía.

Chile tiene órganos sólidos como el Banco Central y el Ministerio de Hacienda. Ambos han aplicado una política monetaria y fiscal expansivas. Pero también responsables. Y aunque uno no esté de acuerdo con los retiros, las AFP fueron pulmones que le dieron aire al cuerpo de la economía. Hay que reconocer el impacto de los retiros y la rapidez y eficiencia con que actuaron las AFP. A la hora de repartir, las AFP lo hicieron mucho mejor que el Estado.

Si nuestro cuerpo económico ha mostrado ser robusto ante esta dura enfermedad, la atención que está recibiendo el paciente es mérito de nuestro sistema de salud. En Chile hemos implementado un proceso de vacunación reconocido a nivel mundial. En solo cuarenta días se vacunaron más de cinco millones personas. Más de dos millones ya tienen su segunda vacuna. Y la meta de inoculación se cumpliría durante este primer semestre.

Cuando muchos países sufren la mortal escasez de vacunas, hay que agradecer y reconocer que el Gobierno fue ágil y previsor. Ya tenemos once millones de vacunas. Pronto llegarán cuatro millones más. Y así nos acercamos a los treinta y cinco millones de vacunas comprometidas. Esto es el doble de lo que necesitamos.

La gestión chilena ante la crisis del covid-19 ha sido ejemplar. Se ha seguido el calendario al pie de la letra. Y cuando varios “vacunagates” azotan y avergüenzan a países vecinos, en Chile el Presidente Piñera hizo la cola para vacunarse. Como cualquier ciudadano, la hizo donde estaba y cuando le tocaba. Otra muestra de dignidad y valores democráticos.

Las expectativas y el animal spirits auguran un muy buen año para el cuerpo de la economía. Hay mucha energía acumulada, pero también muchos empleos por recuperar. Ahora bien, si la buena salud sigue acompañando al cuerpo de la economía, es de esperar que también acompañe al cuerpo de la política. Ese es el gran desafío.