Norman Atkins, fundador de la Universidad Relay en Estados Unidos explica su fórmula para mejorar la educación de los grupos más vulnerables.
La premisa de que todos los estudiantes, independientes de su historia, pueden alcanzar los más altos logros y que la responsabilidad de los profesores es hacer que eso pase, fue el punto de partida que tuvo Norman Atkins para fundar la Universidad Relay en Estados Unidos. Atkins expuso su experiencia en el seminario «Revolucionando la formación docente y directiva, preparando a los educadores que nuestros niños necesitan y merecen», en el que conversó con la investigadora del CEP, Sylvia Eyzaguirre y Rodrigo López, gerente general de Aptus.
Al relatar su historia, Atkins señaló que un grupo integrado por tres redes de colegios particulares subvencionados de alto desempeño (KIPP, Achievement First y Uncommon Schools) en vista de su frustración con la poca preparación de los profesores que llegaban a sus establecimientos decidieron que ellos iban a entrenar a los docentes que necesitaban». Para eso fundaron Relay que hoy tiene sedes en 15 ciudades de EE.UU. y forma cada año a más de 3.500 profesores y directivos escolares.
Atkins habló también de las claves que han desarrollado, en términos de estrategias y técnicas, para que los profesores tengan las herramientas para convertirse en buenos docentes y de la importancia de contar con directores muy comprometidos con ellos. «Si no hay un director que apoye, es imposible que el profesor tenga éxito», concluyó.
Este seminario se efectuó el 22 de noviembre pasado.
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