N° 469, noviembre 2017
Puntos de Referencia
Economía
Relaciones internacionales

El momento económico internacional y nacional. Noviembre 2017

Vittorio Corbo.

Lea, además, la presentación realizada en la reunión privada «El Momento Económico Noviembre 2017» el 9 de noviembre de 2017.

La recuperación cíclica de las principales economías de los países avanzados y emergentes sigue en curso y tomando más fuerza. La actividad repunta y el desempleo cae, especialmente en Estados Unidos (EE.UU.), la Zona Euro (ZE) y Japón.

En EE.UU. y la ZE las mejores expectativas, la reducción del desempleo, la baja inflación y el fortalecimiento de la inversión, han apoyado el mayor dinamismo de la actividad durante el año. Por su parte, la Reserva Federal (FED) y el Banco Central Europeo (BCE) trabajan en un ajuste de sus políticas, en medio de un crecimiento más robusto, aunque la inflación se mantiene acotada.

En China la actividad crece por encima de la meta se habían fijado sus autoridades económicas, mientras éstas siguen ocupadas en controlar el excesivo endeudamiento de las empresas no-financieras y la pronunciada alza en el precio de los activos inmobiliarios. Por su parte, el resto de países emergentes se benefician de un mejor entorno externo, el cual se refleja en el alza de los precios de los commodities, especialmente de los productos mineros y del petróleo, en mayores flujos de capitales, menor volatilidad y en un alza en los precios de los activos financieros.

En cuanto a las proyecciones, para este año se espera un crecimiento mundial, a paridad de poder de compra, en torno a 3,7 por ciento y 3,8 por ciento para el 2018.
La economía chilena mejora respecto al primer semestre, de la mano del repunte de la minería, pero el sector no minero se mantiene aún débil. La inversión se encamina a una nueva contracción este año, mientras el consumo se mantiene resiliente en un entorno de baja inflación y apreciación de la moneda. En el margen, la actividad del comercio al por menor, las exportaciones e importaciones crecen. Por su parte, las expectativas de los consumidores y empresarios repuntan, aunque se mantienen en terreno negativo.

En el mercado laboral la tasa de desempleo aumenta levemente, en medio de un menor crecimiento del empleo asalariado —el empleo asalariado privado cae en términos anuales, mientras el asalariado público crece con fuerza—, y la masa salarial real se desacelera en el margen. Por su parte, la posición fiscal se deteriora, en tanto que las proyecciones de ingresos ajustados por el ciclo utilizadas en el presupuesto del año 2018 son optimistas, lo que anticipa que la reducción del déficit estructural no va a ser una tarea fácil. En cuanto a la inflación anual, la medida subyacente —sin alimentos y energía —, sigue baja, afectada por la apreciación del peso y la ampliación de brechas de capacidad. De otra parte, la inflación total ha mostrado volatilidad en sus registros mensuales afectada por movimientos en los precios de los alimentos y de la energía.

En cuanto a las proyecciones, para este año se estima un crecimiento en el rango del 1,4 al 1,6 por ciento, y una inflación entre un 1,7 y 2,0 por ciento. Para el próximo año se estima un crecimiento en la parte superior del rango del 2,25 al 3,25 por ciento y una inflación anual a diciembre en el rango del 2,4 al 2,8 por ciento.