N° 487, agosto 2018
Puntos de Referencia
Ciencias Sociales
Educación
Equidad de género

¿Existe sesgo de género a la hora de elegir colegios? Estudio en base a preferencias reveladas del sistema de admisión centralizado

Sylvia Eyzaguirre T., Andrés Hernando.

En general, no encontramos grandes diferencias en las postulaciones a colegios en función del sexo de los postulantes. Sin embargo, marginalmente advertimos diferencias estadísticamente significativas en las postulaciones.

En 2017 se implementó en cinco regiones el nuevo sistema de postulación y admisión escolar. Este sistema revela valiosa información sobre las preferencias de las familias. Este trabajo intenta averiguar si existe sesgo de género en las características de los colegios que las familias eligen para sus hijos e hijas.

En general, no encontramos grandes diferencias en las postulaciones a colegios en función del sexo de los postulantes. Sin embargo, marginalmente advertimos diferencias estadísticamente significativas en las postulaciones.

En promedio, la participación de mujeres en el proceso de postulación a pre-kínder fue levemente menor (0,3 puntos) que la de los hombres. A nivel regional, empero, la brecha en la participación entre mujeres y hombres es mayor que el promedio nacional, siempre superior a 1,5 puntos porcentuales en desmedro de las mujeres, con excepción de la región de Coquimbo, donde la participación femenina supera en 4,5 puntos la de los hombres. Si consideramos el número de postulaciones por género en todos los niveles del sistema escolar, observamos que las mujeres postularon en el margen a menos colegios que los hombres (3,57 versus 3,62 colegios). Esta brecha se mantiene para el nivel de pre-kínder.

En relación con las características de los establecimientos educacionales, observamos que la postulación a colegios con copago y a colegios particulares subvencionados fue menor en mujeres que en hombres. Además, las mujeres postularon en promedio a colegios con menor promedio SIMCE y mayor índice de vulnerabilidad que los hombres. Con todo, en el nivel de pre-kínder las brechas disminuyen considerablemente y en algunos casos desaparecen.

¿Repercutieron estas pequeñas diferencias en el resultado de admisión? Si analizamos los datos de admisión, observamos que las mujeres obtuvieron un mejor resultado que los hombres. Más mujeres que hombres (83,8 versus 82,3 por ciento) quedaron aceptadas en una de sus preferencias. La misma ventaja se observa cuando analizamos el nivel de aceptación en las primeras preferencias (56,6 versus 55,6 por ciento). Esta brecha en favor de las mujeres se mantiene en el nivel de pre-kínder.

Si analizamos las características de los establecimientos escolares en los cuales fueron admitidos, advertimos que proporcionalmente más mujeres que hombres fueron admitidas en colegios particulares subvencionados y con copago. En relación con el SIMCE y el IVE, las diferencias observadas en las postulaciones desaparecen.

¿Cómo se explica que a las mujeres les haya ido mejor en el proceso de admisión que a los hombres, si en el proceso de postulación se observan diferencias que las perjudican? Analizamos distintos factores que pudieran explicar el buen resultado de las mujeres en el proceso de admisión, pero no encontramos ningún factor que pudiera explicar dicho resultado, excepto el de la diosa Fortuna.