En el Puntos de Referencia “Las consecuencias de las distinciones. El Informe PNUD 2024”, el investigador senior Aldo Mascareño sostiene que la expectativa de un ‘proyecto común’ y la atribución de la conducción del cambio fundamentalmente a la relación entre elites y movimientos sociales, con una ciudadanía cruzada por procesos de individuación, invisibiliza la operación de actores y dinámicas subyacentes que explican buena parte de los desafíos y posibilidades de la sociedad chilena actual.
- El reconocido Informe PNUD ha regresado con nuevas interpretaciones sobre la sociedad chilena contemporánea. Ahora, la conducción del cambio social es su foco. En lo central, el Informe diagnostica una sociedad chilena compleja que ha cambiado en múltiples aspectos, pero a la cual le falta profundidad, velocidad y dirección en los cambios.
- Esto revelaría debilidades en las capacidades de conducción del cambio, en especial en elites y movimientos sociales, los dos actores fundamentales para tal conducción según el Informe.
- Por medio de un análisis sociológico del mismo, la reinterpretación de datos y literatura complementaria, en este artículo argumento que el diagnóstico de complejidad de la sociedad chilena que hace el Informe es adecuado, pero sus respuestas y propuestas no siguen consecuentemente este diagnóstico.
- La expectativa de un ‘proyecto común’ y la atribución de la conducción del cambio fundamentalmente a la relación entre elites y movimientos sociales, con una ciudadanía cruzada por procesos de individuación, invisibiliza la operación de actores y dinámicas subyacentes que explican buena parte de los desafíos y posibilidades de la sociedad chilena actual.
- El artículo concluye que esto tiende a simplificar la imagen de la sociedad chilena que el Informe originalmente describe, lo que dificulta elaborar aprendizajes para la conducción del cambio en este escenario de complejidad.