Nº 298, octubre 2008.
Puntos de Referencia
Economía
Políticas públicas

Por qué liberalizar las tarifas de telefonía fija

Alexander Galetovic, Ricardo Sanhueza.

  • Esta nota propone liberalizar las tarifas de telefonía fija local. Por casi 30 años la Subtel ha fijado el cargo fijo más un cargo variable, el así llamado servicio local medido. Argumentamos que las condiciones del mercado de las telecomunicaciones han cambiado a tal punto que la fijación de tarifas es innecesaria, porque la telefonía móvil es sustituto eficaz y superior de la telefonía fija.
  • La evolución del tráfico fijo-fijo desde 2000 es inconsistente con la tesis de que la telefonía fija no tiene sustitutos. En efecto, entre 2000 y 2007 el PIB aumentó 30%, el número de hogares en medio millón y el número de empresas en alrededor de 100.000. Al mismo tiempo, desde que se les concedió la flexibilidad tarifaria a las telefónicas reguladas, las tarifas de telefonía fija cayeron a lo menos 20%. Sin embargo, entre 2000 y 2007, el número de líneas fijas aumentó apenas 2,3% y el tráfico fijo-fijo cayó 32,8% (llamadas) o 38,6% (minutos). A menos que se crea que las llamada fijo-fijo son un bien inferior, la caída del tráfico es inexplicable si no existieran sustitutos.
  • Buena parte del tráfico fijo-fijo se trasladó hacia la telefonía móvil –la suma de minutos de salida de ambas telefonías se mantuvo constante entre 2000 y 2007. Esto refleja el aumento de la telefonía móvil: entre 2000 y 2007 el número de líneas móviles se multiplicó más de cuatro veces, las llamadas de salida por 4,96 y el número de minutos por 4,43. Al mismo tiempo, en enero de 2008 las tarifas móviles estaban apenas por encima de las fijas. Con todo, el que la suma de minutos de salida de ambas telefonías se mantuviera constante sugiere que hay otros sustitutos de las comunicaciones de voz –v. gr. el chateo, el correo electrónico o la internet.
  • La caída del tráfico implica que el ejercicio de fijación de precios que prevé la ley es inaplicable e irrelevante. Hoy apenas una de cada cinco líneas residenciales mantiene la tarifa regulada y ésta debiera aumentar bastante por la caída del tráfico. Más generalmente, la regulación ya no puede cumplir con lo que promete –fijar tarifas que generan ingresos suficientes para autofinanciar a una empresa eficiente que provee exclusivamente telefonía fija.
  • Varios competidores se oponen a la liberalización y piden restringir políticas comerciales de las telefónicas sujetas a regulación. Estas restricciones son inconvenientes, porque seguramente atenúan competencia en precios.
  • Finalmente, en un apéndice revisamos y comentamos los argumentos que se han esgrimido en contra de la liberalización en el contexto de la consulta que la Subtel le hizo al Honorable Tribunal de la Libre Competencia.